Los trastornos funcionales del tubo digestivo son una de las entidades más frecuentes en la práctica clínica en gastroenterología y medicina interna. Deterioran significativamente la calidad de vida de los pacientes y generan importantes costos en salud. La forma de abordar estos pacientes es mediante la juiciosa realización de algunos estudios complementarios orientados a descartar confundidores (enfermedades que comparten los mismos síntomas) y fundamentalmente mediante el abordaje multidisciplinario. 

La Neurogastroenterología es la subespecialidad dedicada a la evaluación y el tratamiento de los trastornos funcionales y motores del tubo digestivo en su totalidad. Entre las patologías y los síntomas más frecuentemente evaluadas se encuentran: disfagia esofágica y orofaríngea, Trastornos motores del esófago como la Acalasia, Enfermedad por Reflujo gastroesofágico, síntomas supra esofágicos (tos crónica, laringitis, disfonía), Dispepsia funcional, Síndrome de Intestino Irritable, Sobrecrecimiento Bacteriano Intestinal, Constipación funcional, Diarrea crónica, Incontinencia fecal y otros trastornos del piso pélvico.

La enfermedad inflamatoria intestinal (EII) representa un grupo de afecciones intestinales inflamatorias crónicas idiopáticas. Las dos categorías nosológicas principales que cubre el término son la enfermedad de Crohn (EC) y la colitis ulcerosa (CU).

Si bien sabemos que no son enfermedades altamente prevalentes y no hay estadísticas en la Argentina,  su  incidencia y prevalencia están en aumento. 

Sumado a esto hay un importante retraso  en el tiempo de diagnóstico de la  enfermedad, y esto puede ser responsable  de   complicaciones y mala respuesta al tratamiento.

Los objetivos del tratamiento de la EII no sólo deben ser reducir la actividad de la enfermedad desde el punto de vista clínico, endoscópico e incluso histológico, sino también mejorar la calidad de vida y el grado de discapacidad de los pacientes, a través de una óptima calidad de atención.

Evaluación de las patologías del intestino delgado que generan trastornos de malabsorción. Entre las patologías más prevalentes, en Argentina, se encuentra la enfermedad celíaca; estimada en la población adulta 1:169 entre mujeres y hombres. La atención de los pacientes incluirá el cribado por medio de anticuerpos específicos, evaluación endoscópica con la respectiva toma de biopsias para la confirmación diagnóstica. ​Evaluación y control nutricional por nutricionista experta para implementar de manera adecuada la dieta libre de gluten y seguimiento del paciente multidisciplinario.

Basado en la atención para el diagnóstico y tratamiento de enfermedades agudas y crónicas del hígado y la vía biliar. La forma de presentación  de las enfermedades hepáticas puede ser muy similar, por eso es importante la evaluación inicial por hepatólogos especializados que permitan elegir el tratamiento adecuado evitando la progresión de las enfermedades. Entre las patologías más frecuentes se encuentran las hepatitis virales, tóxicas, medicamentosas, autoinmune. Las enfermedades colestásicas como la cirrosis biliar primaria, colangitis esclerosante primaria, obstrucción de la vía biliar, enfermedades metabólicas y hereditarias  como las esteatohepatitis, hemocromatosis y enfermedad de Wilson.